El sábado 18 de septiembre de 2010, se desarrolló en la ciudad de San Miguel el Foro sobre: "El Acuerdo de Asociación entre la UE y Centroamérica". Dicho evento fue organizado por el Partido FMLN con el propósito de dar a conocer a la ciudadanía y las diferentes organizaciones sociales participantes, el significado e impacto que tendrá dicho acuerdo para la economía del país, para el medio ambiente y otros aspectos que no se deslindan del impacto en mención, si éste es firmado por el Estado salvadoreño.
La publicidad aparecida en los medios de comunicación tiene un símil a la que apareció cuando se le vendió la idea al pueblo salvadoreño que al firmar el TLC-CAFTA con Estados Unidos, la economía salvadoreña iba a crecer.
Se le hizo creer a la gente, en ese entonces, so pretexto de la lógica del mercado nostálgico, que con el TLC iban a tener la posibilidad de exportar pupusas, loroco, garrobos, embutidos de miel, horchata embolsada, etc., pero la realidad actual ha confirmado todo lo contrario y, consecuentemente, la balanza comercial se mantiene deficitaria; es decir, ingresan más productos de Estados Unidos que los que se exportan de aquí de El Salvador hacia ese país del norte, lo cual acusa otro defecto...hay fuga de divisas.
Esto tiene a su base la abismal asimetría entre las economías de ambos países. Es una especie así de - en términos metafóricos, pero reales - una relación existente entre un tiburón y un pez...¿Quién se comerá a quién?.
Hoy está en boga el "Acuerdo de Asociación" que no es más que otro TLC, solo que disfrazado en conceptos que lo hace más digerible..."Asociación", pero que es algo más de lo mismo y con mayor impacto negativo para la débil economía salvadoreña.
La asimetría con la UE lo es mucho mayor que la sostenida con Estados Unidos. Centroamérica únicamente cuenta con 6 países participantes: Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica y Panamá, último que ha sido incluido sin tener presencia en el PARLACEN por el retiro de sus Diputados/as en respeto a la disposición del actual Presidente, siendo un requisito en la vía de la integración y participación del Acuerdo, pero que se ha incluido por los réditos que tendrá para la UE, contar con el Canal para la comercialización de las mercancías que desde el Atlántico pasarán hasta el Pacífico.
En esta relación asimétrica, la UE cuenta con 27 países participantes, relación que pone al país y a la región en general, en una clara desventaja comercial, sin soslayar que la superioridad númerica en términos de países participantes en el Acuerdo de Asociación, lleva sumada la superioridad en lo que a desarrollo económico respecta.
¿Pero por qué estará interesada la UE en un Acuerdo de Asociación con la Región Centroamericana?
Hay dos elementos claves que dan respuesta a la interrogante
A nivel mundial hay una clara disputa de los territorios entre los bloques económicos que se han creado posterior a la caída del muro de Berlín, el bloque soviético y la finalización de la guerra fría sostenida entre Este y Oeste por más de 6 décadas (mundo bipolar). Entre esos bloques figura: la UE, los países asiáticos y el ALBA (Sur América), a los que se suma el imperio (EE.UU). Todos están buscando establecer "Acuerdos" con una lógica económico-comercial, pero también político-ideológica.
El otro elemento sustancial está ligado a los recursos naturales. Las empresas europeas instaladas en Francia, Inglaterra, España, Italia, etc., han devastado sus recursos naturales. Por esa razón, las materias primas últiles para mover sus industrias y fortalecer sus economías, también están mermadas y debilitadas. Y esa realidad es igual para el imperio que está disminuyendo cada vez más sus reservas de petroleo entre otras materias primas, sin excluir el vital líquido del agua.
En tal sentido, pretenden con un "Acuerdo de Asociación" continuar con el despojo de los recursos naturales que aún existen en los países de Mesoamérica; despojo que iniciaron durante el siglo XVI en el marco de la invasión efectuada en tierras Mesoamericanas y Latinoamericanas, a efectos de que sus industrias y sus economías no se paralicen.
Esto deja claro que la guerra no solamente es mediática y militar, sino, sobre todo, económica y comercial; y son los territorios de Latinoamérica donde se están librando esas batallas. ¿Será casualidad que eso esté sucediendo?
El tema continuará en una segunda edición.
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